El equipo de Carlos Ischia ganó en La Ciudadela por 2 a 1, Lucas Viatri y Luciano Figueroa marcaron para los xeneixes, en tanto que Saavedra marcó el empate parcial. Gutiérrez le atajó un penal a Riquelme.
En una Ciudadela repleta, Boca derrotó a San Martin por 2 a 1 en un encuentro que hubo de todo. Con una sensación térmica que rondaba los 50 grados, los hinchas tuvieron que soportar el infierno que era la Ciudadela con un sol que partía en dos. Hasta los bomberos tuvieron una leve y refrescante aparición para refrescar por algunos minutos en las populares donde no cabía ni un alfiler.
El encuentro a lo largo de los 90 minutos, hubo de todo un poco, penales no cobrados tanto para el Santo y como para el xeneixe y un regular arbitraje de Carlos Maglio.
El hombre de negro sancionó una falta sobre Figueroa que vio el sólo, pero no sancionó un claro faul sobre el ratón Ibáñez que todo el estadio y los miles seguidores por TV vieron que fue un claro penal.
El partido
El conjunto de la Rivera buscó dominar las acciones desde el mismo inicio del encuentro, el Santo se dedicó a cuidar que las principales figuras de Boca no tuvieran espacio ni control del balón.
Boca utilizó las proyecciones por izquierda de Jesús Dátolo, llegó reiteradamente al arco de Gutiérrez, aunque no era demasiado peligroso.
Mientras que San Martín le costó diez minutos acomodarse en la cancha para comenzar a generarle peligro al arquero Javier García. La primera jugada seria del encuentro se produjo a los diez minutos, con un remate desde fuera de Raúl Saavedra que se fue muy cerca.
Nueve minutos más tarde, Mario Turdó lo tuvo con un cabezazo, pero el balón salió desviado.
Boca tenía la pelota pero careció de profundidad, hasta que hizo su primera aparición el árbitro del encuentro, al sancionar un faul que el solo vio y marcó la pena máxima, una falta de Pérez Castro sobre Figueroa tras una centro.
A los 23 minutos el disparo de Juan Román Riquelme sobre el palo izquierdo de Marcos Gutiérrez, que el arquero Santo no tuvo inconveniente en controlar en dos tiempos el remate.
Inmediatamente la respuesta de San Martin llegó al minuto, en una pelota parada de Gerardo Solana que pegó en el travesaño, tuvo la oportunidad de abril el marcador.
A los 36 llegó la apertura del marcador, una nueva escapada de Dátolo quien envió un centro rasante. El balón pasó el segundo palo, Saavedra en su afán de evitar el corner no hizo más que devolver el balón al área chica. Lucas Viatri, parado como buen goleador que es, no perdonó.
Daniel Vega en tiempo de descuento, no logró conectar correctamente un nuevo centro por derecha de Cantero.
Los minutos finales de la primera etapa, Boca justificó la diferencia y pudo aumentar con un remate de Viatri que salió muy cerca del poste izquierdo.
Con el ingreso de Gustavo Ibáñez en el complemento, San Martin ganó más profundidad en tres cuarto de cancha. Vega no pudo conectar de cabeza en una clara jugada en plena área de Boca.
A los 14 llegó la igualdad, con un potente remate desde 35 metros de Saavedra, que la clavó en el ángulo superior izquierdo de un García que intentó pero no pudo evitar la caída de su valla.
El estadio estalló por la justica en el resultado, pero la alegría no duró demasiado. Ya que tres minutos más tarde
Boca volvió a poner en ventaja, una falta inexistente sobre Riquelme que cobró el árbitro, la defensa santa se durmió.
La ejecución fue del propio Riquelme, el volante la pico para habilitar magistralmente a un solitario Luciano Figueroa que de zurda y de primera clavó el 2 a 1.
En desventaja el Santo propuso un partido de ida y vuelta, allí se vio lo mejor del encuentro.
Hasta que en una gran jugada de Ibáñez ingresando al área fue derribado por Sebastián Battaglia, un claro penal que Maglio no sancionó.
Sobre el cierre del encuentro Dátolo se fue expulsado por una infracción sobre Ibáñez que no existió, minutos más tarde Pérez Castro ingresó con pelota dominada y Juan Forlín lo derribó en el vértice del área mayor que nuevamente Maglio no vio y le mostró la segunda tarjeta amarilla, al interpretar que se tiró y se fue expulsado.
Con el correr de los minutos, Boca fue cerrando un encuentro difícil para apoderarse de la punta del torneo.San Martin vendió cara la derrota y sufrió el regular arbitraje de Maglio, que influyó en el resultado. San Martin no mereció perder el encuentro, quizás la igualdad hubiese sido lo más lógico, Pero tampoco Boca mereció que le dieran una gran mano para subir a la cima del torneo. -Publicado 23 Nov 08-
En una Ciudadela repleta, Boca derrotó a San Martin por 2 a 1 en un encuentro que hubo de todo. Con una sensación térmica que rondaba los 50 grados, los hinchas tuvieron que soportar el infierno que era la Ciudadela con un sol que partía en dos. Hasta los bomberos tuvieron una leve y refrescante aparición para refrescar por algunos minutos en las populares donde no cabía ni un alfiler.El encuentro a lo largo de los 90 minutos, hubo de todo un poco, penales no cobrados tanto para el Santo y como para el xeneixe y un regular arbitraje de Carlos Maglio.
El hombre de negro sancionó una falta sobre Figueroa que vio el sólo, pero no sancionó un claro faul sobre el ratón Ibáñez que todo el estadio y los miles seguidores por TV vieron que fue un claro penal.
El partidoEl conjunto de la Rivera buscó dominar las acciones desde el mismo inicio del encuentro, el Santo se dedicó a cuidar que las principales figuras de Boca no tuvieran espacio ni control del balón.
Boca utilizó las proyecciones por izquierda de Jesús Dátolo, llegó reiteradamente al arco de Gutiérrez, aunque no era demasiado peligroso.
Mientras que San Martín le costó diez minutos acomodarse en la cancha para comenzar a generarle peligro al arquero Javier García. La primera jugada seria del encuentro se produjo a los diez minutos, con un remate desde fuera de Raúl Saavedra que se fue muy cerca.
Nueve minutos más tarde, Mario Turdó lo tuvo con un cabezazo, pero el balón salió desviado.
Boca tenía la pelota pero careció de profundidad, hasta que hizo su primera aparición el árbitro del encuentro, al sancionar un faul que el solo vio y marcó la pena máxima, una falta de Pérez Castro sobre Figueroa tras una centro.
A los 23 minutos el disparo de Juan Román Riquelme sobre el palo izquierdo de Marcos Gutiérrez, que el arquero Santo no tuvo inconveniente en controlar en dos tiempos el remate.Inmediatamente la respuesta de San Martin llegó al minuto, en una pelota parada de Gerardo Solana que pegó en el travesaño, tuvo la oportunidad de abril el marcador.
A los 36 llegó la apertura del marcador, una nueva escapada de Dátolo quien envió un centro rasante. El balón pasó el segundo palo, Saavedra en su afán de evitar el corner no hizo más que devolver el balón al área chica. Lucas Viatri, parado como buen goleador que es, no perdonó.
Daniel Vega en tiempo de descuento, no logró conectar correctamente un nuevo centro por derecha de Cantero.
Los minutos finales de la primera etapa, Boca justificó la diferencia y pudo aumentar con un remate de Viatri que salió muy cerca del poste izquierdo.
Con el ingreso de Gustavo Ibáñez en el complemento, San Martin ganó más profundidad en tres cuarto de cancha. Vega no pudo conectar de cabeza en una clara jugada en plena área de Boca.
A los 14 llegó la igualdad, con un potente remate desde 35 metros de Saavedra, que la clavó en el ángulo superior izquierdo de un García que intentó pero no pudo evitar la caída de su valla.
El estadio estalló por la justica en el resultado, pero la alegría no duró demasiado. Ya que tres minutos más tarde
Boca volvió a poner en ventaja, una falta inexistente sobre Riquelme que cobró el árbitro, la defensa santa se durmió.
La ejecución fue del propio Riquelme, el volante la pico para habilitar magistralmente a un solitario Luciano Figueroa que de zurda y de primera clavó el 2 a 1.En desventaja el Santo propuso un partido de ida y vuelta, allí se vio lo mejor del encuentro.
Hasta que en una gran jugada de Ibáñez ingresando al área fue derribado por Sebastián Battaglia, un claro penal que Maglio no sancionó.
Sobre el cierre del encuentro Dátolo se fue expulsado por una infracción sobre Ibáñez que no existió, minutos más tarde Pérez Castro ingresó con pelota dominada y Juan Forlín lo derribó en el vértice del área mayor que nuevamente Maglio no vio y le mostró la segunda tarjeta amarilla, al interpretar que se tiró y se fue expulsado.
Con el correr de los minutos, Boca fue cerrando un encuentro difícil para apoderarse de la punta del torneo.San Martin vendió cara la derrota y sufrió el regular arbitraje de Maglio, que influyó en el resultado. San Martin no mereció perder el encuentro, quizás la igualdad hubiese sido lo más lógico, Pero tampoco Boca mereció que le dieran una gran mano para subir a la cima del torneo. -Publicado 23 Nov 08-
