Publicado 12 Jul 07: La selección Argentina clasificó para la final de la Copa América, por segunda vez consecutiva tras vencer a México por 3-0. Los goles fueron marcados por Gabriel Heinze, Lionel Messi y Juan Román Riquelme (de penal).
El equipo argentino nuevamente volvió a mostrar su mejor repertorio en el complemento, etapa en la que liderado por un Lionel Messi genial, dejó sin nada a un adversario que lo complicó en la primera parte.
El encuentro no tuvo el brillo esperado, pero la obra maestra de Messi en el segundo tanto y algunas maniobras del “Pulga” enriquecieron la noche guayanesa.
El conjunto Mexicano tuvo un gran trabajo en la media cancha en el primer tiempo, llevó a un equipo albiceleste a estar incómodo. Ya que controló los espacios y los jugadores claves argentinos, esto llevó a que el conjunto de Basile contara tener poco contacto con la pelota, los delanteros estaban desconectados del resto de las líneas y la última línea tuvo demasiado trabajo para frenar a los delanteros mexicanos que atacaron con mucha determinación.
Argentina sin hacer pie en el campo de jugo y no tomar bien las marcas en el medio campo. México tuvo una oportunidad a los 35 cuando Andrés Guardado estrelló su disparo en un poste luego de una buena jugada colectiva.
Luego del susto Argentina se acomodó en el terreno y a los 41 puso el primer aviso tras una pared de Tévez y Riquelme, que finalizó con el remate cerca del arco de Osvaldo Sánchez.
Solo había corrido el reloj un par de minutos, llegó una falta de Torrado sobre Riquelme tras una contra. El tiro libre fue ejecutado por el propio Riquelme, centro profundo sobre la izquierda de Sánchez quien dudó en salir y fue anticipado por Heinze que con pierna izquierda marcó el 1 a 0. La apertura del tanteador a pocos minutos del final de la primera parte, influyó en el desarrollo posterior del encuentro.
Una obra maestra de Messi
En el complemento, mejoró el desempeño del conjunto de Basile, con la tranquilidad que le daba el resultado parcial, en tanto que el conjunto de Hugo Sánchez mandó a la cancha a Alberto medina por Gerardo Torrado. Cuando menos lo esperaba el conjunto mexicano tuvo que soportar las gambetas y la velocidad de Messi.
A los 61’ el “Pulga” regaló una joya al anotar el gol más bonito del torneo, el zurdo recibió una pelota en profundidad por la derecha del área y ante la marca, picó la pelota sobre el cuerpo del defensor y del arquero Sánchez, para marcar en emboquillada perfecta 2-0.
El segundo tanto Argentino terminó de liquidar con las pretensiones del equipo de Hugo Sánchez, que cerca de los 55 estuvo cerca de la igualdad con un disparo de Castillo que caminó por el travesaño.
Ya con un México con poca resistencia, los delanteros Argentinos comenzaron a distribuir del balón y tener mayor juego. A un minuto después del segundo tanto Riquelme casi convierte y en la siguiente jugada 61’ Rafa Márquez interpuso su cuerpo para no dejar avanzar a Tévez dentro del área grande, el árbitro marcó penal, que Riquelme convirtió en gol tras picar la pelota para poner 3 a 0.
Ya con el resultado puesto Argentina metió el partido en el freezer, y se dedicó a hacer correr la pelota para correr el reloj. La esperada revancha estará en la final, cuando el domingo enfrente a Brasil.
El equipo argentino nuevamente volvió a mostrar su mejor repertorio en el complemento, etapa en la que liderado por un Lionel Messi genial, dejó sin nada a un adversario que lo complicó en la primera parte.
El encuentro no tuvo el brillo esperado, pero la obra maestra de Messi en el segundo tanto y algunas maniobras del “Pulga” enriquecieron la noche guayanesa.
El conjunto Mexicano tuvo un gran trabajo en la media cancha en el primer tiempo, llevó a un equipo albiceleste a estar incómodo. Ya que controló los espacios y los jugadores claves argentinos, esto llevó a que el conjunto de Basile contara tener poco contacto con la pelota, los delanteros estaban desconectados del resto de las líneas y la última línea tuvo demasiado trabajo para frenar a los delanteros mexicanos que atacaron con mucha determinación.
Argentina sin hacer pie en el campo de jugo y no tomar bien las marcas en el medio campo. México tuvo una oportunidad a los 35 cuando Andrés Guardado estrelló su disparo en un poste luego de una buena jugada colectiva.
Luego del susto Argentina se acomodó en el terreno y a los 41 puso el primer aviso tras una pared de Tévez y Riquelme, que finalizó con el remate cerca del arco de Osvaldo Sánchez.
Solo había corrido el reloj un par de minutos, llegó una falta de Torrado sobre Riquelme tras una contra. El tiro libre fue ejecutado por el propio Riquelme, centro profundo sobre la izquierda de Sánchez quien dudó en salir y fue anticipado por Heinze que con pierna izquierda marcó el 1 a 0. La apertura del tanteador a pocos minutos del final de la primera parte, influyó en el desarrollo posterior del encuentro.
Una obra maestra de Messi
En el complemento, mejoró el desempeño del conjunto de Basile, con la tranquilidad que le daba el resultado parcial, en tanto que el conjunto de Hugo Sánchez mandó a la cancha a Alberto medina por Gerardo Torrado. Cuando menos lo esperaba el conjunto mexicano tuvo que soportar las gambetas y la velocidad de Messi.
A los 61’ el “Pulga” regaló una joya al anotar el gol más bonito del torneo, el zurdo recibió una pelota en profundidad por la derecha del área y ante la marca, picó la pelota sobre el cuerpo del defensor y del arquero Sánchez, para marcar en emboquillada perfecta 2-0.
El segundo tanto Argentino terminó de liquidar con las pretensiones del equipo de Hugo Sánchez, que cerca de los 55 estuvo cerca de la igualdad con un disparo de Castillo que caminó por el travesaño.
Ya con un México con poca resistencia, los delanteros Argentinos comenzaron a distribuir del balón y tener mayor juego. A un minuto después del segundo tanto Riquelme casi convierte y en la siguiente jugada 61’ Rafa Márquez interpuso su cuerpo para no dejar avanzar a Tévez dentro del área grande, el árbitro marcó penal, que Riquelme convirtió en gol tras picar la pelota para poner 3 a 0.
Ya con el resultado puesto Argentina metió el partido en el freezer, y se dedicó a hacer correr la pelota para correr el reloj. La esperada revancha estará en la final, cuando el domingo enfrente a Brasil.