Los dirigidos por Carlos Roldán lograron su tercer triunfo consecutivo al vencer a Quilmes por 1 a 0, “Jota” Morales en el complemento fue el autor del tanto de la victoria. San Martín lidera el torneo con 22 puntos, mientras que el Cervecero quedó con 19 y Belgrano, que todavía no jugó, con 18 unidades.
-Por Maria Belém - En la primera parte el Santo salió a controlar la pelota y se encontró con un cervecero bien parado y ordenado en la cancha.
En la media cancha fue el sector donde se disputaba tramo a tramo el poder de la pelota, Gil y Oviedo fueron contenidos mientras que el “Chopo” Serrano sufrió con el 2-1 impuesta por la visita.
De ese modo Quilmes trató de quitarle ritmo y eficacia al medio campo santo, a los 13’ Caffa tuvo su primera gran intervención al tapar un remate de Esteban García.
Las acciones se fueron generando con el correr de los minutos, 27’ JJ Morales remató en el borde al área y el disparo salió desviado ante un Pontiroli que solo atinaba a hacer vista.
En el minuto 34 Monge quiso salir jugando con pelota dominada, Olivares se anticipó al capitán y enfrentó a Caffa quien se quedó con el disparo cuando todo indicaba que la visita llegaba a la apertura del marcador.
Tres minutos más tarde un centro de Gil, fue capturado por Morales y su disparo se elevó ante la salida desesperada de Pontiroli.
Dos minutos después, Marclay escapó a la marca de Krikorian y dejó a Caffa en el camino, su remate exigido pegó en un palo. Se salvó el santo en la más clara de la visita y de la noche.
En el complemento San Martín salió decidido a cambiar su imagen de la primera parte, Roldán cambio la forma de plantear el partido.
En el primer llamado de atención para Quilmes de la etapa final, increíblemente Serrano no pudo conectar con entre varias piernas dentro del área chica y su remate se elevó sobre el horizontal.
Se viene el estallido, se viene el estallido, reza una estrofa del rock nacional interpretado por los Piojos. Esteban Gil cedió para el ratón Ibáñez, el centro pegó en el pie de Gorostegui, Pontiroli sorprendido vio como la palomita de JJ Morales ingresaba a su arco y sintiendo en carne propia el estallido de la Ciudadela al grito de Gooolllll.
Mientras que en las tribunas la locura estaba instalada por los miles de hinchas, el Ratón Ibáñez contó con dos oportunidades para aumentar.
Quilmes se olvidó del libreto y se fue decidido a buscar la igualdad, los santos con el correr de los minutos continuaron jugando mejor, esto le permitió quedarse con tres puntos vitales para seguir bien arriba y sin ninguna compañía. - Publicado 19 Oct 07 -
-Por Maria Belém - En la primera parte el Santo salió a controlar la pelota y se encontró con un cervecero bien parado y ordenado en la cancha.
En la media cancha fue el sector donde se disputaba tramo a tramo el poder de la pelota, Gil y Oviedo fueron contenidos mientras que el “Chopo” Serrano sufrió con el 2-1 impuesta por la visita.
De ese modo Quilmes trató de quitarle ritmo y eficacia al medio campo santo, a los 13’ Caffa tuvo su primera gran intervención al tapar un remate de Esteban García.
Las acciones se fueron generando con el correr de los minutos, 27’ JJ Morales remató en el borde al área y el disparo salió desviado ante un Pontiroli que solo atinaba a hacer vista.
En el minuto 34 Monge quiso salir jugando con pelota dominada, Olivares se anticipó al capitán y enfrentó a Caffa quien se quedó con el disparo cuando todo indicaba que la visita llegaba a la apertura del marcador.
Tres minutos más tarde un centro de Gil, fue capturado por Morales y su disparo se elevó ante la salida desesperada de Pontiroli.
Dos minutos después, Marclay escapó a la marca de Krikorian y dejó a Caffa en el camino, su remate exigido pegó en un palo. Se salvó el santo en la más clara de la visita y de la noche.
En el complemento San Martín salió decidido a cambiar su imagen de la primera parte, Roldán cambio la forma de plantear el partido.
En el primer llamado de atención para Quilmes de la etapa final, increíblemente Serrano no pudo conectar con entre varias piernas dentro del área chica y su remate se elevó sobre el horizontal.
Se viene el estallido, se viene el estallido, reza una estrofa del rock nacional interpretado por los Piojos. Esteban Gil cedió para el ratón Ibáñez, el centro pegó en el pie de Gorostegui, Pontiroli sorprendido vio como la palomita de JJ Morales ingresaba a su arco y sintiendo en carne propia el estallido de la Ciudadela al grito de Gooolllll.
Mientras que en las tribunas la locura estaba instalada por los miles de hinchas, el Ratón Ibáñez contó con dos oportunidades para aumentar.
Quilmes se olvidó del libreto y se fue decidido a buscar la igualdad, los santos con el correr de los minutos continuaron jugando mejor, esto le permitió quedarse con tres puntos vitales para seguir bien arriba y sin ninguna compañía. - Publicado 19 Oct 07 -