Publicado 10 Set 07: Desde el minuto inicial Atlético fue a buscar la apertura del marcador, pero chocó con un Lujan de Cuyo bien escalonado en su propio campo.A pesar de contar con el poder de la pelota y el terreno, Atlético careció de ideas para desequilibrar el esquema defensivo de la visita.
Solari dispuso una modificación táctica en el terreno de juego, con Pablo Hernández en el banco y con dos de punta Luís Rodríguez y Carlos Paratore, la dupla no dio los resultados esperados.
Y si a esto le sumamos que Montiglio y Longo fueron absorbidos muy bien por los volantes laterales de Luján, Claudio Sarría muy solitario tuvo que retratarse un metro para tener contacto con la pelota.
El “Pulgita” Rodríguez buscó generar situaciones sobre el marco de Julio Chiarini, a los 11’ mandó un centro cruzado desde la izquierda, que no pudo conectar ni Sarría ni Martín Martos. Un rato mas tarde no logró definir una veloz contra de Paratore y el arquero se quedó con el mano a mano.
La visita antes del descanso tuvo su oportunidad, Diego Próspero mandó un centro que encontró a Zbrum totalmente solo dentro del área. El delantero cabeceó a las manos de Ischuk. Llamado de atención para el fondo decano.
En el complemento, Atlético sustituyó con actitud la falta de fútbol y fue inclinando la cancha. A los 16’ el Pulguita en gran jugada personal le cometieron un claro penal que el árbitro dejo pasar. Solari mandó a la cancha a Ramírez Silva y a Leva en lugar de Longo y Paratore respectivamente.
El rosarino Diego Erroz inició una pared con Rodríguez, que continuó con Ramírez Silva, quien devolvió la pared a Erroz, que lanzó un centro para Leva metiera la punta del botín, marcara la apertura del marcador y desatara la locura en el Monumental a pesar de los 35 grados en la siesta tucumana.
El 1-0 le dio tranquilidad al decano para manejar la pelota en la media chanca, con el ingreso del juvenil Sergio Maradona por Rodríguez.
Con el correr de los minutos, todo indicaba que el local se encaminaba a una nueva victoria, Lujan volvió a contar como en el primer tiempo de una oportunidad, este vez la desaprovechó. En el epílogo del encuentro Zbrum tuvo un mano a mano ante Ischuk para decretar la igualdad 1 a 1.
