Publicado 17 Set 07: El ex militar Daniel Giménez dejará el arbitraje, pero antes disparó contra todos.
El árbitro internacional, el chaqueño Daniel Giménez, confirmó que dejará la actividad profesional, y criticó duramente a varios sectores del fútbol, como al Colegio de Arbitros de la AFA y a su presidente, Jorge Romo, de quien sostuvo está rodeado de “obsecuentes y alcahuetes”.
Giménez, quien cumple actualmente una suspensión de 90 días para dirigir partidos oficiales, vinculó a Romo como una de las principales causas de su decisión. “Romo es uno de los responsables de mi decisión. En realidad hay muchas razones y otros responsables”, cuestionó el árbitro en declaraciones radiales.
Pero Romo no fue el único destinatario de los cuestionamientos de Giménez, sino que también apuntó contra su ex colega Juan Carlos Crespi, a quien acusó de un ser obsecuente de Romo en vez de colaborar con Abel Gnecco, titular de la Escuela de Arbitros. Tampoco se salvó el asistente Juan Carlos Rebollo, recusado por Juan Pablo Pompei para que no lo vuelvan a poner con él. “Todos sus errores siempre favorecen al mismo equipo”, dijo.
Durante la temporada pasada, Giménez estuvo varias veces en el ojo de la tormenta, aunque su corolario ocurrió en junio último, cuando tuvo una pésima actuación en la segunda final por el ascenso entre San Martín de San Juan y Huracán.
Otro de los particulares episodios que lo tuvo como protagonista fue la suspensión del encuentro entre Gimnasia y Esgrima La Plata y Boca, cuando denunció amenazas por parte del presidente del elenco platense Juan José Muñoz. “Hay un presidente patotero y pistolero que me amenazó y patoteó. Tengo la autoridad para suspender el partido, cosa que hice, y me cuestionan”, se atajó Giménez, pero sin nombrar a Muñoz.
“Parece que Quilmes hubiera descendido (a la B Nacional) por culpa mía. ¿Si desconfío de los dirigentes? Cuando hablo de Quilmes, hablo de José Luis Meiszner (su presidente)”, arremetió tras los cuestionamientos recibidos por convalidar un gol con la mano de Ariel Ortega, que le dio el triunfo a River sobre el conjunto “cervecero”.
Curiosamente, dentro de las críticas, uno de los pocos que se salvó fue el presidente de la AFA, Julio Grondona, quien “se portó muy bien” con Giménez.
El árbitro internacional, el chaqueño Daniel Giménez, confirmó que dejará la actividad profesional, y criticó duramente a varios sectores del fútbol, como al Colegio de Arbitros de la AFA y a su presidente, Jorge Romo, de quien sostuvo está rodeado de “obsecuentes y alcahuetes”.
Giménez, quien cumple actualmente una suspensión de 90 días para dirigir partidos oficiales, vinculó a Romo como una de las principales causas de su decisión. “Romo es uno de los responsables de mi decisión. En realidad hay muchas razones y otros responsables”, cuestionó el árbitro en declaraciones radiales.
Pero Romo no fue el único destinatario de los cuestionamientos de Giménez, sino que también apuntó contra su ex colega Juan Carlos Crespi, a quien acusó de un ser obsecuente de Romo en vez de colaborar con Abel Gnecco, titular de la Escuela de Arbitros. Tampoco se salvó el asistente Juan Carlos Rebollo, recusado por Juan Pablo Pompei para que no lo vuelvan a poner con él. “Todos sus errores siempre favorecen al mismo equipo”, dijo.
Durante la temporada pasada, Giménez estuvo varias veces en el ojo de la tormenta, aunque su corolario ocurrió en junio último, cuando tuvo una pésima actuación en la segunda final por el ascenso entre San Martín de San Juan y Huracán.
Otro de los particulares episodios que lo tuvo como protagonista fue la suspensión del encuentro entre Gimnasia y Esgrima La Plata y Boca, cuando denunció amenazas por parte del presidente del elenco platense Juan José Muñoz. “Hay un presidente patotero y pistolero que me amenazó y patoteó. Tengo la autoridad para suspender el partido, cosa que hice, y me cuestionan”, se atajó Giménez, pero sin nombrar a Muñoz.
“Parece que Quilmes hubiera descendido (a la B Nacional) por culpa mía. ¿Si desconfío de los dirigentes? Cuando hablo de Quilmes, hablo de José Luis Meiszner (su presidente)”, arremetió tras los cuestionamientos recibidos por convalidar un gol con la mano de Ariel Ortega, que le dio el triunfo a River sobre el conjunto “cervecero”.
Curiosamente, dentro de las críticas, uno de los pocos que se salvó fue el presidente de la AFA, Julio Grondona, quien “se portó muy bien” con Giménez.